Babes Gym

Ruidos metálicos de fondo, el sonido de esfuerzo impulsivo que trata de mejorarse poco a poco. Lágrimas, sudor y sangre en algunos casos, eso era lo que se podía apreciar en todos y cada una de las personas que pululaban en este gimnasio, siendo en su mayoría mujeres que se han quedado a ejercitarse para verse mejor o quizás... ¿Por algo más?

Entre aquel festín de jadeos y esfuerzo, sobresale la imagen de una hermosa mujer; con caderas anchas, trasero grande y firme, vientre marcado pero no demasiado, coronado por un par de jugosos pechos pecadores que llaman la atención a cada una de las personajes que se ejercitan. Con paso decidido y aura dominante te acercas a una de las nuevas mujeres que ha llegado el día de hoy a pedir su inscripción.

Lo estás haciendo mal, chica digo mientras me acerco a aquella hembra regordeta y pego mis caderas a su ancho y gordo culo. Dejame ayudarte.

Gracias... Responde aquella chica mientras se sonroja y mira hacia otro lado, tratando de evitar mayor contacto.